jueves, 14 de enero de 2010

"No hay negocio que aguante esto"





A oscuras

Por racionamiento deben replantearse pedidos de productos y horarios de trabajo



Las panaderías despacharon lo que pudieron en medio del corte de luz
Las lavanderías están entre los negocios más afectados
Los comerciantes se plantean cerrar entre las 12 y las 4 pm por falta de luz

Las panaderías despacharon lo que pudieron en medio del corte de luz

La confusión y la desinformación reinó entre los comerciantes que hacen vida entre la avenida San Ignacio con calle Sucre de Chacao, donde el racionamiento eléctrico no se aplicó según lo previsto en el plan de la Electricidad de Caracas.

Si bien algunos comercios tomaron medidas para proteger sus neveras y equipos de apagones, la rapidez con la que fue ejecutado el plan no dio tiempo para que la mayoría realizara las previsiones necesarias.

Tanto los comerciantes como los habitantes de este sector contaban con que el corte de luz se aplicaría entre las 12 de la noche hasta las 4 de la madrugada. Sin embargo, se produjo a las 12 del mediodía y se mantuvo hasta las 4 de la tarde, horario que es fundamental para el sector comercial en especial para los que expenden alimentos.

Algunos incluso creían que el comercio estaba exento de la medida. El restaurante de Tilio Hernández, en la calle Sucre de Chacao, sirve almuerzos justamente en el horario cuando se aplica el racionamiento en ese sector, entre las 12 y 4 p.m.

"El comercio no debería verse afectado. Uno puede aplicar medidas para ahorrar energía. Cómo voy a hacer. Tendré que abrir un día sí y uno no porque trabajamos hasta las 4 de la tarde", expresó.

Amalia Depiovesan, propietaria del local de comida por kilo Sapioli, manifestó que "no hay negocio que aguante este racionamiento un día sí y otro no durante cinco meses".

Pero el impacto económico de estos negocios va más allá de ofrecer un producto de primera calidad, pues durante el tiempo que dure el racionamiento no todos podrán facturar -los puntos de venta quedan fuera de servicio- y tampoco podrán conformar cheques, el único modo de pago será en efectivo y eso les restará clientes.

Hay otros sectores, como las lavanderías y las peluquerías, que prácticamente se paralizan.

María Hernández, encargada de la lavandería Eu e ti prevé que tendrá que trabajar sólo un turno, lo que le representará menos trabajo y menos ingresos. "Sin luz no hay nada. Quién sabe si podremos seguir trabajando".

Muchos comercios que operaban en horario corrido prevén cerrar esas cuatro horas porque no tienen la capacidad operativa para facturar.

Pero hay otros que no se verán afectados porque suelen cerrar entre la 1 p.m. y las 3 p.m.

"Son dos horas menos de trabajo, pero no hago nada aquí porque sin sistema no podemos trabajar", indicó Alex Figuera.

Luego de producirse el corte, en las peluquerías varias clientes quedaron a medio atender; en las panaderías la improvisación salió a reducir; en los restaurantes muchos almorzaron sólo con la claridad del día.

Algunos comercios cuentan con cajas registradoras con baterías que duran 72 horas, pero no están seguros de que puedan aguantar el racionamiento. También les preocupa cómo harán la declaración de IVA.

Reconfiguración Ante esta situación a muchos les toca replantearse la operatividad del negocio. Las panaderías prevén reprogramar la elaboración de pan pues si se interrumpe la refrigeración de la masa se pierde el producto.

Los restaurantes deberán preparar toda la comida en la mañana, pocos podrán recalentar, y no ofrecerán bebidas frías.

Los que expenden lácteos se replantearán los pedidos. Algunos no pedirán leche pasteurizada los días que les toque el corte de luz y reducirán los pedidos de yogures y quesos.

Durante el tiempo que estén sin luz no podrán abrir las neveras para expender ningún producto, pues deben preservar el frío el mayor tiempo posible para evitar que se dañen los artículos. Las carnicerías garantizan la calidad del producto.

En algunas zonas del centro de la ciudad el corte también se aplicó de 12 a 4 pm, lo que obligó a algunos, como el Centro Comercial Galerías Avila, a cerrar sus puertas.

Angie Contreras C.
EL UNIVERSAL


EL UNIVERSAL. Caracas, 14 de Enero del 2010 p.

No hay comentarios:

Publicar un comentario